El origen marinero de la fideuà
La fideuà es uno de los platos más emblemáticos del litoral valenciano y, por extensión, de toda la cocina mediterránea. Su historia se remonta a principios del siglo XX, en la ciudad de Gandía. Según la leyenda más popular, un grupo de pescadores decidió preparar una paella de marisco, pero en lugar de utilizar arroz, usaron fideos. ¿El motivo? Se dice que el patrón del barco era tan aficionado al arroz que siempre se servía raciones más generosas para él, dejando menos para el resto de la tripulación. Para evitarlo, cambiaron el ingrediente principal por fideos, pensando que le gustaría menos. Sin embargo, el resultado fue tan delicioso que pronto se convirtió en una receta habitual en las cocinas marineras de la zona.
Ingredientes esenciales de una buena fideuà
A pesar de las múltiples versiones que existen, la fideuà tradicional tiene una base muy clara: fideos finos (habitualmente del número 2), marisco fresco y un caldo de pescado bien concentrado. El sofrito es fundamental para construir el sabor del plato, y suele llevar cebolla, ajo, tomate y, en algunas versiones, pimiento rojo o verde.
En cuanto al marisco, los más habituales son las gambas, cigalas, calamares, sepia o incluso mejillones. Todo depende de la disponibilidad y de la frescura del producto. Lo importante es que sean ingredientes del mar que aporten sabor y textura al conjunto.
Formas de preparación: tradición y variantes
La fideuà se cocina normalmente en una paella, al igual que el arroz, extendiendo bien los ingredientes para que se repartan de forma uniforme. Una de las claves está en la cocción del fideo, que debe quedar en su punto justo, sin pasarse ni quedar duro.
Algunas versiones modernas de la receta optan por llevarla unos minutos al horno, buscando una capa superficial crujiente que añade un contraste muy interesante. También hay quien utiliza fideos más gruesos o incluso fideuàs que incorporan ingredientes más atrevidos, como trozos de pescado limpio, alioli con ajo negro o un toque de lima rallada al final.
El acompañamiento más tradicional es el alioli, una salsa de ajo y aceite que potencia el sabor del marisco y combina a la perfección con la textura de los fideos.
El secreto está en el caldo
Como sucede con cualquier receta marinera, el auténtico secreto está en el caldo. Un buen fumet elaborado con espinas de pescado blanco, cabezas de gambas y verduras básicas (como zanahoria, puerro o apio) marcará la diferencia. Cuanto más tiempo se deje reducir, más intenso será el sabor que luego impregnará los fideos. Es un paso que requiere paciencia, pero que garantiza un resultado espectacular.
La fideuà en Restaurante Fénix Olèrdola
En Fénix Olèrdola, la fideuà es uno de esos platos que nos gusta preparar. Cuando encontramos marisco fresco de calidad y sentimos que es el momento perfecto, la cocinamos con todo el cariño y respeto por la tradición.
Es un plato que invita a compartir, a disfrutar con calma y en buena compañía. Nuestra versión busca ese equilibrio entre lo clásico y lo actual, manteniendo la esencia de la fideuà de siempre, pero cuidando cada detalle: desde el punto del fideo hasta la intensidad del caldo, pasando por una presentación que celebra el mar.
Si visitas nuestro restaurante y ves fideuà entre las sugerencias del día, no lo dudes: es una de esas experiencias gastronómicas que merecen la pena.